YA ES SEMANA SANTA

YA ES SEMANA SANTA
Ver pinchando la imagen

Páginas

domingo, 1 de junio de 2025

DO,INGO DE LA ASCENSIÓN

 LUNES

“ Tened valor: yo he vencido al mundo ”



egún san Juan 16, 29-33 

En aquel tiempo, los discípulos dijeron a Jesús: «Ahora sí que hablas claro y no usas comparaciones.

 Ahora vemos que lo sabes todo y no necesitas que te pregunten; por ello creemos que has salido de Dios». 

Les contestó Jesús: «¿Ahora creéis? Pues mirad: está para llegar la hora, mejor, ya ha llegado, en que os disperséis cada cual por su lado y a mí me dejéis solo. 

Sin embargo algo que nos comunica el Evangelio es la victoria sobre el mal, el Señor nos invita a tener paz en Él. A confiar en que Él ha vencido al mundo. Jesús ha vencido al mundo, es decir, ha salido victorioso. “Os he hablado de esto, para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo”.

Pero no estoy solo, porque está conmigo el Padre. 

Os he hablado de esto, para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo».

Es todo un camino apasionante pero no sin adversidades, ya señala a sus discípulos que “en el mundo tendréis luchas”, siempre podremos verlas como un reto para poner a prueba nuestra respuesta de amor, se nos brindara la ocasión para dejarnos podar y manifestar nuestra fidelidad, entrega, sacrificio y la importancia que tiene la fe en nuestras vidas.

Recordar que el discípulo no es mas que el maestro, que tenemos que contar con la incomprensión, la burla, el ataque… Y una de las bienaventuranzas ya nos prepara para la persecución como camino de autenticidad: “Dichosos cuando os persigan por mi causa”.


Su Palabra debe de ser donde radique nuestra fuerza. En los momentos de duda, de dolor, de adversidad, cuando tengamos que atravesar las mayores tribulaciones, que indudablemente sobrevendrán, tengamos en cuenta estas palabras del Señor para renovarnos en la esperanza y seguir adelante. Todo es posible con Él.


DOMINGO DIA  DE LA ASCENSIÓN

El misterio de la Ascensión del Señor, al mismo tiempo que proclama y corrobora la fe en el Resucitado, apunta y atrae la mirada creyente hacia lo alto, hacia la meta final a la que todos aspiramos. Hoy es, pues, un día gozoso en el peregrinaje de la fe, alentados por el ejemplo de nuestro hermano mayor, Cristo Jesús, entronizado en la gloria de Dios.

“ Mientras los bendecía, se separó de ellos ”


En este domingo nos encontramos con una fiesta del Señor, donde nos acercamos a dos realidades: su ausencia y su presencia,

“Con esta fiesta recordamos que Jesús, después de su resurrección, se apareció a los discípulos durante cuarenta días (cf. Hch1, 3), al cabo de los cuales, habiéndolos conducido al monte de los Olivos, «lo vieron levantarse hasta que una nube se lo quitó de la vista» (Hch1, 9).

según San Lucas 24, 46-53 

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Así está escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se proclamará la conversión para el perdón de los pecados a todos los pueblos, comenzando por Jerusalén. 

Vosotros sois testigos de esto. Mirad, yo voy a enviar sobre vosotros la promesa de mi Padre; vosotros, por vuestra parte, quedaos en la ciudad hasta que os revistáis de la fuerza que viene de lo alto». 

Y los sacó hasta cerca de Betania y, levantando sus manos, los bendijo. 

No parece lógica esta alegría. Lo lógico sería que los discípulos quedasen tristes ante la marcha del Señor. Pero la lógica cristiana tiene poco que ver con la lógica humana. Aquellos discípulos saben que, aunque ya no podrán disfrutar de la presencia física de Jesús, Él está con ellos todos los días hasta el fin del mundo.

Y mientras los bendecía, se separó de ellos, y fue llevado hacia el cielo.

 El cielo no se conquista “mirando al cielo”. Si Cristo se ha hecho “hombre” y se ha encarnado en nuestro mundo, y ha trabajado, ha sufrido, ha luchado por hacer un mundo más humano, más fraterno, y ha muerto en una Cruz, es para que todos nosotros le sigamos.

Él ha ido por delante para “prepararnos sitio, para que estemos siempre donde Él está” (Jn. 14, 3). El mejor camino para ir al cielo es seguir el camino de Jesús: «Pasó por la vida haciendo el bien. La mejor manera de prepararse para el cielo es pasar haciendo el bien.



 Ellos se postraron ante él y se volvieron a Jerusalén con gran alegría; y estaban siempre en el templo bendiciendo a Dios.

CUMPLEAÑPS DEL PRIOR DE LOS AGUSTINOS

 Encuentro fraterno: el Papa celebra cumpleaños del Prior de los Agustinos



Después de la Misa del Jubileo de las Familias, el Pontífice se trasladó al cercano Colegio Internacional Santa Mónica para compartir el almuerzo con la comunidad agustiniana y festejar los 70 años del padre Alejandro Moral, su amigo desde hace décadas.



El Papa León XIV almuerza, este domingo 1 de junio de 2025, con sus hermanos agustinos en el Colegio Internacional Santa Mónica, a solo unos pasos de su residencia en el Vaticano. Tras presidir la misa del Jubileo de las Familias, los Niños, los Abuelos y los Ancianos en la Plaza de San Pedro, el Pontífice se dirigió a la comunidad religiosa ubicada en la vía Paolo VI, donde conviven estudiantes de la Orden de San Agustín de diversos países y varios docentes del Instituto Patrístico Augustinianum. Allí participó de un encuentro fraterno preparado para celebrar el 70º cumpleaños del Prior General, padre Alejandro Moral.



Caminos que se cruzan La suya es una amistad de larga data. El Papa y el padre Alejandro —nacido en La Vid, España, el 1 de junio de 1955— se conocieron en Roma en los años ochenta, precisamente en el Colegio Santa Mónica. Por entonces, el joven Robert Prevost estudiaba Derecho Canónico en la Pontificia Universidad Santo Tomás de Aquino, mientras Moral cursaba Sagrada Escritura en el Pontificio Instituto Bíblico y Teología Dogmática en la Universidad Gregoriana. 

 Sus caminos se separaron en 1985: Prevost, ordenado sacerdote tres años antes, fue enviado a la misión agustiniana de Chulucanas, en Piura (Perú), mientras que Moral regresó a España tras completar sus estudios. Volverían a encontrarse en Roma en 2001, durante un capítulo de la Orden agustiniano.




Vidas distintas, un lazo que permanece Cuando Prevost fue elegido Prior General de la Orden, eligió a Alejandro Moral como su Vicario y lo confirmó también en su segundo mandato. Durante doce años trabajaron codo a codo, fortaleciendo una amistad construida en la fraternidad y el servicio. 




 Aunque en 2013 sus trayectorias volvieron a divergir —Prevost regresó a su provincia agustiniana en Chicago y Moral fue elegido 97º Prior General—, el vínculo nunca se rompió. Un año después, el Papa Francisco nombró a Robert Prevost administrador apostólico de la diócesis de Chiclayo, Perú, y más tarde obispo. Pero la afinidad agustiniana y el afecto entre ambos continuaron firmes, inspirados en la espiritualidad de san Agustín: aquella vida en común, de “unidad de mente y de corazón” (Regla), para “buscar juntos a Dios en plena concordia”, de modo que quien hallara la verdad primero pudiera “conducir a los demás hacia ella sin dificultad” (Soliloquios, 1, 12, 20-13, 22).




FUE LLEVADO HASTA EL CIELO

 del santo evangelio según san Lucas (24,46-53) 

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Así estaba escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se predicará la conversión



“ fue llevado hacia el cielo ”
La solemnidad de la Ascensión del Señor nos invita a contemplar uno de los misterios más profundos de nuestra fe: Jesús, tras cumplir su misión en la tierra, regresa al Padre, llevando consigo nuestra humanidad redimida. No es un adiós definitivo, sino la culminación de su obra y el comienzo de una nueva etapa en la historia de la salvación. 

 El relato de los Hechos de los Apóstoles nos muestra cómo, a la vista de los discípulos, Jesús es elevado al cielo. Ellos permanecen mirando fijamente al cielo, quizá con asombro y nostalgia, pero reciben un mensaje claro: no deben quedarse inmóviles, sino ser testigos de todo lo que han visto y oído. La Ascensión no es una llamada a quedarse mirando al cielo, sino a ponerse en camino, a anunciar la Buena Nueva hasta los confines de la tierra. 
 El Evangelio de Lucas nos recuerda la promesa de Jesús: enviará sobre los discípulos la fuerza que viene de lo alto. No estamos solos en esta tarea; el Espíritu Santo es quien nos capacita para la misión. Antes de partir, Jesús los bendice, gesto que encierra ternura, protección y envío. Esa bendición sigue resonando hoy en la vida de la Iglesia: somos enviados al mundo para anunciar la conversión y el perdón de los pecados, con la certeza de que Cristo, glorificado, intercede por nosotros. 

 San Pablo, en la carta a los Efesios, nos ayuda a mirar más allá: Cristo está sentado a la derecha del Padre, por encima de todo principado, potestad y dominación. Su señorío es universal y eterno. Pero no se aleja de nosotros: es cabeza de la Iglesia, que es su cuerpo. Unidos a Él, participamos de su victoria y de su misión. 



 Por tanto, la Ascensión nos recuerda que nuestra vida no está cerrada en este mundo: estamos llamados a mirar al cielo, pero con los pies firmes en la tierra, siendo testigos valientes de la esperanza que nos sostiene. Que, como los discípulos, sepamos acoger la bendición de Cristo y llevarla a todos los rincones de nuestra vida.

ME DEL CORAZÓN DE JESÚS DIA 1

 MES DEL CORAZÓN DE JESÚS

REFLEXIONES DIA A DIA  SOBRE EL CORAZON DE JESÚS DURANTE TODO EL MES



Oración de entrada  
Vuelve tus ojos de amigo y de hermano e infunde en nosotros sentimientos de paz, de fraternidad, de fortaleza y de justicia todo ello, Señor, son y las necesitamos como semillas divinas
La devoción limpia, sincera y bien centrada en el Corazón de Cristo es el resumen del Evangelio de Juan............el Amor de Dios.

Bendice, Corazón de Jesús, a los que te buscan y se dan de bruces con el muro del escepticismo a los que dudan y se quedan encarcelados en sus propias incertidumbres a los que lloran y se ahogan en el mar de propias lágrimas a los que sufren y caen bajo el peso del madero de sus propias cruces.

Día 1.- EL DIVINO CORAZÓN DE JESÚS

 ¡El Corazón de Jesús! Una herida, una corona de espinas, una cruz, una llama, "He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres".
 ¿Quién nos ha dado aquel Corazón? Jesús mismo. Él nos había dado todo: su doctrina, sus milagros, sus dones de la Eucaristía, su Madre divina.
 Pero el hombre permanece todavía insensible a tantos dones. Su soberbia les hace olvidar el Cielo, sus pasiones les hacen descender al fango. Fue entonces cuando Jesús mismo dirigió una mirada piadosa sobre la humanidad; se apareció a su hija predilecta, Margarita María de Alacoque, para manifestarle los tesoros de su corazón.

Santa Margarita Maria Alacoque – Sagrado Corazon de Jesus | Reina ...

Oración final, 
 Miranos  Amigo y Señor y no dejes de mirarnos por que contigo podemoscaminar segurosy hacer frente con la fe en tu presenia a las dificultades de nuestra vida.
Que ti Corazón sea el impulso de nuestra vida y que nos mueva siempre a buscar los signos de tu presencia en cada dia. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN VOS CONFIO, 3 veces.

sábado, 31 de mayo de 2025

DESPEDIDA DEL MES DE MAYO

 




Bajo el manto de María, el Papa guía un camino de fe 



El Santo Padre León XIV clausuró el mes mariano en la Gruta de Lourdes de los Jardines Vaticanos, como es tradición: "Que la lengua esté en armonía con la vida y los labios con la conciencia", invitó el Pontífice en su breve alocución.



En un ambiente de recogimiento y alegría, el Papa León XIV participó en la tradicional conclusión del mes mariano este sábado, 31 de mayo, en la Gruta de Lourdes de los Jardines Vaticanos. La vigilia, oficiada por el Cardenal Mauro Gambetti, Vicario General de Su Santidad para la Ciudad del Vaticano y arcipreste de la Basílica de San Pedro, consistió en el rezo del santo rosario, que comenzó en la Iglesia de San Esteban de los Abisinios (detrás de la Basílica vaticana) y finalizó en la Gruta, tras una procesión con antorchas. 



Acompañado por fieles, religiosos y miembros de la Curia, el Santo Padre reflexionó sobre la dimensión comunitaria de la fe, enmarcada este año en el Jubileo. "Nos hemos reunido bajo el manto maternal de María, como un solo pueblo en camino", afirmó el Pontífice al inicio de su breve discurso, destacando la importancia de la oración compartida como un signo de una Iglesia viva y peregrina. 




A lo largo del recorrido, los fieles meditaron los Misterios Gozosos, contemplando los momentos clave de la infancia de Jesús, desde la Anunciación hasta el hallazgo en el Templo.


El Pontífice citó a san Juan Pablo II al recordar que el Rosario es una oración de "fisonomía mariana y corazón cristológico", que resume en sí toda la profundidad del mensaje del Evangelio. Inspirado por la Palabra de Dios, el Papa alentó a los fieles a mirar la vida como un itinerario de fe, un camino que, al igual que el recorrido realizado esa noche, debe estar guiado por la alabanza, la esperanza y la obediencia a Dios. 



"Pidamos al Señor la gracia de alabarlo cada día, 'con la vida y con la lengua, con el corazón y con los labios, con la voz y con la conducta', como nos enseñó san Agustín", recordó León XIV, invitando a evitar las disonancias y a que "la lengua esté en armonía con la vida, y los labios con la conciencia".


En un gesto de gratitud, el Santo Padre expresó su reconocimiento especial a las Hermanas Benedictinas del Monasterio Mater Ecclesiae, cuya oración silenciosa y constante "sostiene la vida de la Iglesia universal", afirmó.


"Que la alegría de este momento crezca en nosotros y nos impulse a servir con fidelidad", concluyó Prevost, antes de impartir su bendición final, confiando a María el camino de cada uno.






https://youtu.be/Eak_0gbaXuQ?si=6wnojf88X7Ay8bXD

ORDENACION A ONCE SAERDOTES

 El Papa a los nuevos sacerdotes: reconstruir la credibilidad de una Iglesia herida

 En la homilía de la misa de ordenación sacerdotal de once presbíteros para la Diócesis de Roma el Papa León XIV reflexionó sobe la pertenencia al pueblo de Dios del cual los ministros deben ser discípulos cercanos: “Todavía no somos perfectos, pero es necesario ser creíbles”.

31 DE MAYO

En la basílica de San Pedro del Vaticano el Papa León XIV presidió la Misa con rito de Ordenación sacerdotal, este sábado 31 de mayo, consagrando a once nuevos presbíteros para la Diócesis de Roma. “Hoy es un día de gran alegría para la Iglesia -dijo el Pontífice- y para todos y cada uno de ustedes, sacerdotes ordenandos, junto con sus familiares, amigos y compañeros de peregrinación durante sus años de formación”. 




 El Santo Padre reflexionó en su homilía sobre la pertenencia al pueblo de Dios, y al cual son enviados los ministros, “teniendo siempre presente que la identidad del sacerdote depende de la unión con Cristo, sumo y eterno sacerdote”.


Dios reúne a sus hijos 




“Somos el pueblo de Dios. El Concilio Vaticano II hizo más viva esta conciencia, casi anticipando un tiempo en que la pertenencia se debilitaría y el sentido de Dios se enrarecería. Ustedes son testigos de que Dios no se ha cansado de reunir a sus hijos, por diversos que sean, y de formarlos en una unidad dinámica”, dijo el Obispo de Roma en su homilía. 




 El Papa exhortó a los ordenandos a permanecer siempre en el camino del Señor, siendo siervos de Dios en el pueblo de Dios, presentes en un mundo real y no ideal: “como Jesús, son personas de carne y hueso las que el Padre pone en su camino. A ellos se consagran, sin separarse de ellos, sin aislaros, sin hacer del don recibido una especie de privilegio”.




Imposición de las manos 




Luego, reflexionando sobre el significado de la imposición de las manos en el rito de la Ordenación, recordó el Pontífice que “en los Hechos de los Apóstoles, ese gesto, … Es la transmisión del Espíritu creador. Así, el Reino de Dios pone ahora en comunión sus libertades personales, dispuestas a salir de sí mismas, injertando sus mentes y sus fuerzas jóvenes en la misión jubilar que Jesús transmitió a su Iglesia”. 



 “Juntos, pues, reconstruiremos la credibilidad de una Iglesia herida, enviada a una humanidad herida, dentro de una creación herida. Todavía no somos perfectos, pero es necesario ser creíbles”, expresó el Papa animando a los neo sacerdotes en su misión.


Ministros de esperanza 




Indicando además que “Jesús resucitado nos muestra sus heridas y, aunque son signo de rechazo por parte de la humanidad, nos perdona y nos pone en camino. No lo olvidemos. También hoy sopla sobre nosotros (cf. Jn 20,22) y nos hace ministros de esperanza. ‘Para que ya no miremos a nadie a la manera humana’ (2 Co 5,16): todo lo que está roto y perdido a nuestros ojos se nos aparece ahora en el signo de la reconciliación”. Al final de su homilía, el Papa agradeció por el llamado vocacional de los nuevos ministros: “Les damos gracias y damos gracias a Dios que los ha llamado al servicio de un pueblo totalmente sacerdotal. Juntos, unimos el cielo y la tierra”.


https://youtu.be/YvZspiAUspo?si=jlI_X7QXwRN2vBBF

ORACIONES DE LA MAÑANA DE LA PASCUA

  



¡CON TU VICTORIA, SEÑOR!
 Saldremos de la oscuridad de la noche a un inmenso paraíso en el que, sólo, existe el día Con tu victoria sobre el pecado intentaremos ser mejores buscando lo santo y bueno Con tu victoria sobre el mal nos alejaremos de los senderos que alejan de Ti De la tiniebla que nos confunde Del error que nos debilita De la desilusión que nos paraliza
Nuestro cuerpo, además de humanidad, destilará ansias de eternidad De una nueva ciudad y de un nuevo rostro de un mañana mejor y de una felicidad fecunda de un futuro en el que, de verdad, podamos decir que somos felices

ORACIÓN DE LA MAÑANA  


En el silencio de la mañana cuando la aurora anuncia el día, mil avecillas  lanzan sus trinos como alabanza al Creador.

Madre Inmaculada ruega por nosotros no nos abandones solo en Ti esperamos haz que hoy tus hijos te veneren y como un tesoro conserven tu devoción-

A Ti Madre que siempre escuchas. a Ti Madre que siempre estas ahí, a Ti Madre que siempre cumples la voluntad de Dios dame un día tranquilo y que nunca me canse, nunca, nunca de alabar al Creador,

Estrella de los mares tus reflejos Madre en mi ojos resplandecieron. 
Te acuerdas Madre cuántas veces a tus pies rece la Salve. 

 



Te ofrezco Madre lo más bello y mejor que hay en mi corazón. 



Siento Señor, que  habitas en mi ser que tu vida en mi siento vibrar que de ti dependo como un niño que soy una gota en tu inmenso mar. Y en este inmenso mar navego con mis ojos puesto en Pentecostes. 


Creo porque eres el Dios amor y en la un momento difícil de mí vida sentí tu presencia muy cerca de mi. Dios mío espero en Ti y que yo sepa vivir en Ti. 


Que nada ni nadie me separe de TI.

MI FE EN CRISTO

“La Resurrección de Jesús es la verdad culminante de mi fe en Cristo, creída y vivida por la primera comunidad cristiana como verdad central, transmitida como fundamental por la Tradición, 
Señor que resucites en mis debilidades, rencores y mi actitudes negativas.
Tabor
Que la Luz de la Pascua ilumine mi vida para que la alegría refleje tu Luz y abrace mi cruz con amor.



Jesús, buenos días, gracias por este momento de intimidad contigo. Aquí estoy delante de Ti. Quiero escuchar tu voz, que resuenen tus palabras en mi corazón. Deseo amarte, Jesús. Enséñame a amarte y amar a los demás como Tú lo quieres. Deseo permanecer unido a Ti. No me abandones ni me dejes solo. Te necesito. Ayúdame a nunca separarme de tu lado. Y si alguna vez lo hago, dame la gracia de saber que en tus brazos siempre encontraré un refugio amoroso al cual puedo volver.


Él nos da su gracia en los sacramentos, especialmente en la Eucaristía, cuya mesa abundante nos prepara cada domingo  Y, entrando por Él, la Puerta de las ovejas, nos salvaremos. 

Ayudame a colocarte  en el centro de mi corazón aunque amar a los demás resulte difícil. 


VIGILIA PASCUAL


Acepta que el Señor resucitado entre en tu vida, acógelo, abrele tu corazón, confía, ¡Él es la vida! Vida en plenitud. Tiempo especial para dejarnos sorprender por Él. Gloria al Señor y Feliz Domingo de Resurrección.



MADRE DOLOROSA


Dios que deja huella a Cristo en la Cruz nos salva. Y Ella, Nuestra Madre, con sus ojos mirando al cielo, su boca que nos anima a seguir a delante  nos lleva de su mano.

Soy Madre Solorosa mirado por tus ojos, agarrado  por  tus manos, seducido siempre poor la grandeza  de tus  labios para crecer en sabiduría espiritual todos los  días  de mi vida
Mi Nueva vida ......caninar junto a tu Hijo y junto a Ti.

ORACIÓN FINAL



Sentí junto a mi Tu  presencia, el eco oír de tu voz, en Ti encontrar la respuesta amar y gozar de tu amor.
Abrir cuando estas a mi puerta partir en mi mesa tu pan, mi  alma dejar siempre abierta sembrando a mi vera la paz y a los hombres la paz.
Tu eres la luz de mi espera estrella del anochecer, estrella del anochecer, Tu eres la razón verdadera el soplo que alienta mi fe.


Oh Señor, maestro y pastor, dinos lo que es amor.
No hay mayor grandeza que .......................amarte Señor 


Tu amor llena mi vida. Ante ti siento tu grandeza y experimento toda mi pobreza. Me llenas de paz, amor y fuerza, me llenas de Ti. Tu eres mi riqueza. 

Que nunca me falte el deseo de amarte Señor. No tengo  duda de que te amo Señor.
Mi corazón es siempre para Ti y te busca siempre Nazareno poor las cuestas de este mundo, poor las dificultades te buscos yo a Ti. Señor.



Crucificado hasta el final, Oh crucificado amable, profeta y hermano con tus brazos extendidos dices al mundo y a mi .....lo que os quiero
Al pie de tu madero sonrie una Madre......en la hora de dolor siempre me dices .....ahy la tienes